
Vive un poco
Su esposa, Ariadne, enjuaga los restos de huevo de otro plato
más, ¡pero el residuo pegajoso elige pegarse a sus dedos!, y puede estar un
poco consternada por la sensación.
Su esposo
tiene que fruncir el ceño porque nota que su esposa frunce el ceño y porque
todos los miembros de su familia, le parece, están tristes o realmente están
tristes.
Pero la
puerta trasera de la casa se ha estado abriendo y cerrando con frecuencia, y
para el esposo, el padre, ese sonido insinúa su idea de un verano feliz. Ese
es el significado de ese sonido para él.
Él está en
esa puerta mientras sigue a Ariadne hasta donde ella está tendida en una
tumbona de jardín, y uno o dos niños también están afuera, en la caja de arena.
Pero, en
estos días, acercarse demasiado a Ariadne podría resultar en una variedad de
síntomas para cualquiera de ellos, que van desde moderados hasta severos y
fatales, debe darse cuenta.
Pone sus
manos en la garganta de Ariadne cuando ella le habla, pellizcándola lo
suficiente como para romper un tallo, digamos, pero no lo suficiente como para
matar una planta entera.
Luego regresa
a la casa para escapar de ella, pero ella lo encuentra con bastante rapidez
para exhibir sus ojos llorosos y su boca apretada.
¿Pero el
ardor y la ira no son, por lo general parecen, casi lo mismo? Para el
marido, en cualquier caso, lo hacen.
Y cuando
tiene en cuenta a sus hijos, piensa que tal vez no estén tan tristes, porque
¿qué les falta?
Hoy, la caja
de arena de la familia está abundantemente húmeda, lo suficientemente mojada
como para que los niños estén ocupados haciendo pasteles y cavando hoyos llenos
de arena.
Es mejor que
los gemelos disfruten apuñalando la arena. Están fortaleciendo los
músculos de sus dedos y manos con sus palas de juguete, y les encanta escuchar
el silbido de los granos de arena.
El entusiasmo
natural de esta arena es tan influyente, tan persuasivo, ya que se empuja, se
rocía e incluso se frota con los nudillos, o simplemente se juega con un poco. ♦